Ariel Camppilongo se desempeña como preceptor en una escuela secundaria en la ciudad de Ensenada, cargo que ocupa desde hace 25 años. Tras instaurarse la cuarentena, y para no perder el ritmo ni la esencia de su trabajo, Ariel nos cuenta su nueva rutina:
¨Apenas me levanto le envío un wass app a los pibes para que se levanten. A las 8 y 20 de la mañana tomo asistencia, y después controlo en Zoom que hagan la tarea.
¨Ayer me excedí un toque¨, se sincera Ariel,
¨y amonesté a mis propios hijos por “llegar tarde al desayuno”.
¡¡¡Cuánta dedicación!!!
No ampliaremos. Esclusivo de MndoWeb.com